En un nuevo día que la luna esta en lo alto es imposible no irse, Uno se evapora deseando fundirse en su halo y ser eternamente otro... Harto del espacio que ocupamos y del que ocupan los demas deseamos un final, el final de todo. Pero decidimos volvernos en nosotros, y sin una completa razón reforzamos nuestro ego con un disfraz (pintura, vestimenta y sonrisas seductoras)para mirarnos en el espejo y engañarnos -Estoy bien, no tengo de que preocuparme- ¿Acaso de esa forma conseguimos encerrar al monstruo?...
¡No, solo fue sedarlo! Y cuando despierte estará furioso, nosotros otra vez lo sedaremos y creemos que podremos volverlo hacer una y una y una y otra vez hasta que la hoz nos lleve a nuestra eterna morada... Pero nos engañamos, y aun sabiendo que un día no resisteremos, que el monstruo estará tan furiosos por todo el tiempo perdido que no caerá ante el falso ego que nos creamos y será el final. Dañandonos y cortando a los demas, la sangre derramada sera el único vestigio junto con las cenizas de nuestro mundo ahora inexistente. El fin del mundo.
Quiero vivir, quiero sonreir, mi monstruo estuvo siempre conmigo, junto a mí desde que nací... Tendré que aceptarlo, por muy dura que sea la transformación: sin máscaras mi mundo es real, Monstruo es el guardián de la Puerta Verdadera y siendo YO consigo la verdad y realidad de mi mundo hasta que La Muerte venga y me encuentra en el lugar más feliz del mundo Mi Mundo Extraño.
